Presencia Literaria

Ha de fluir el verbo en la corriente del extenuado cuerpo que, al final de las vidas, siempre se abre hacia el mar: Sus olas de amor estremecidas

miércoles, marzo 05, 2014

La Casa de Asterión: Dos poemas de Czesław Miłosz

La Casa de Asterión: Dos poemas de Czesław Miłosz

martes, mayo 22, 2007

¿ES POSIBLE ESCRIBIR LA LLUVIA?


EL LIBRO DE LA LLUVIA
poemas de escritoras chilenas,
Selección de Carlos Ordenes Pincheira

Presentación de Ana María Vieira
Sociedad de Escritores de Chile
17 de mayo de 2007

En el prólogo a una conocida antología de los poetas del mar, el académico y poeta Hugo Montes lamentaba, con mucha razón, la falta de antologías poéticas nacionales sobre temas específicas. En este sentido, la recopilación y selección que hace el poeta Carlos Ordenes Pincheira en esta oportunidad, constituye, a mi juicio, un nuevo y valioso aporte literario que enriquece, no sólo a la poesía chilena en un amplio sentido, sino además contribuye a realzar la creación de las mujeres en el campo de las letras.
Linda Irene Koski, estudiosa de la escritura femenina, en su famosa antología Mujeres Poetas de Chile, ha destacado el creciente interés que existe en conocer la obra literaria de la mujer en Latinoamérica. Y precisamente fundamenta la razón de ser de su trabajo en el olvido histórico que la mujer chilena ha experimentado en la mayor parte de las antologías literarias de ayer y de hoy, Sin embargo, creemos que se está revalorizando la poesía escrita por mujeres; ellas reclaman su espacio cada vez con mayor fuerza.
Este planteamiento coincide cabalmente con el leitmotiv que sin duda ha guiado la iniciativa de Carlos Ordenes Pincheira: rescatar la palabra poética de las mujeres. Y aquí estamos, frente a frente al Libro de la Lluvia: variadas mujeres dotando de significado a un mismo motivo poético.

¿ES POSIBLE ESCRIBIR LA LLUVIA?
Ansias de escribir la lluvia nos dice Alicia Nieva en un lúcido poema que cobra vida en este Libro donde 90 mujeres poetas cantan a la lluvia, no al unísono, sino con sus diferentes voces, con el sello distintivo que cada una de las autoras imprimió a un mismo tema. Así, las poetas que escriben las páginas de este libro y, por tanto, que conforman su historia, se aproximan al texto desde su condición femenina y desde su particular visión del mundo, del arte y la belleza. Y también desde su particular experiencia poética.
Se ha dicho que lo que importa de un poema no es lo que dice sino lo que es. T.S.Eliot pensaba que si la poesía es una forma de comunicación, lo que se comunica es el poema mismo y sólo incidentalmente la experiencia y el pensamiento que se han vertido en él. Podemos estar de acuerdo o no. Para Eliot el poema tiene una existencia que está entre el poeta y el lector, una realidad nueva que no es simplemente la realidad de lo que el escritor está tratando de expresar o de su propia experiencia al escribir el poema.
Es probable que así sea. Tolstoi distinguía en el proceso de creación poética tres fases: experiencia de un sentimiento, evocación y trasmisión. Y así muchos autores. Pero todos coinciden en la necesidad de una experiencia.
Así, cuando canta a la lluvia (en todas sus formas), la mujer poeta proyecta, como en un eco, su propia experiencia, sus propias ensoñaciones, sus propios sueños. Entonces el canto de la lluvia deviene un eco grandioso de las almas femeninas de nuestras poetas. Desde allí es posible escribir la lluvia.
¿Y qué nos trae el eco de la lluvia? Sólo distinguiré tres aspectos:

1. ENSOÑACIÓN DE LA MUERTE.
Las imágenes del agua que cae, el agua-lluvia, con frecuencia representa en los poemas la ensoñación de la muerte. La lluvia escurre, se desliza, socava la tierra, oculta la luz, horada, apela a lo que en nuestra alma hay de efímero y de frágil.
Para Bachelard, el agua es una realidad poética completa… materia con que la naturaleza, con conmovedores reflejos, prepara los castillos del sueño.
Nos dice Gabriela Mistral en “La lluvia lenta” primer poema de este libro: esta agua medrosa y triste/como un niño que padece… El agua es símbolo-reflejo de un estado anímico ligado a menudo a lo onírico pero también vinculado a un sentido de disolución.. Y Gabriela Mistral, en elogio del agua expresa: el agua es ágil y no lleva memoria consigo…el agua camina arrodillada, como deben ir allá arriba los ángeles de la Reverencia,,,el agua inarticulada…libre de coyunturas como el aire, sin las muñecas y los tendones de las demás criaturas…el agua que se da sin romperse, única dación sin dolor, que puede ser en la altura la de los ángeles.
No es extraño sentir que el agua que cae nos lleva a un estado de reflexión melancólica, a veces trágica, de soledad, desamparo, dolor y muerte. El poeta asimila la lluvia a lágrimas cósmicas que la naturaleza vierte sobre el mundo y sobre las almas. Lluvia tenue, a veces, pero siempre tenaz y persistente. La lluvia es la sustancia de la melancolía. Y a veces de la soledad y la desesperación.
Escuchemos:

.Paz Molina: el agua sigue entonando su muerte..
.Gloria Aguirre: algo se deshace también en mí/bajo la lluvia.
.Daisy Bennett: sus agujas de vidrio/zurcen mi soledad en el lienzo del día….
.Elsa Fernández Artucio nos cuenta de amores disueltos como la lluvia en la lluvia”
.Alejandra Zahri titula su poema Luvia y Angustia
.María Rosa Carrasco poetiza: y mis lágrimas se hacen lluvia en los cristales”.
.María Cristina Menares nos regala su notable visión de un hombre embriagado bajo la lluvia.
.Wally: en cada gota siento que me llamas, evocando al ausente.
.Muy hondo me llegó el poema de Nely Sanders ¿Cómo quererme?, donde se muestra el dolor mientras ríe la lluvia en el techo de su casa.
.Lila Calderón en su Lluvia Final, sostiene una visión apocalíptica cruzada por la lluvia: los poetas mueren. El pecho les estalla…su dolor atraviesa los flechazos de lluvia…y desaparecen convertidos en leyenda…

2. MATERNIDAD DE LA LLUVIA
Existe también la maternidad de la lluvia: agua que nutre, alimenta, es leche que da de beber a la tierra y limpia el aire, hace crecer las plantas, provee a los ríos y lagos, tintinea, salta, devela, El agua-lluvia acuna, como una madre. La lluvia, entonces, es mujer. Da belleza a todas las sombras, hace renacer todos los recuerdos. Es la lluvia dulce. La lluvia lustral de Cecilia Simonetti.
.Nina Donoso: La lluvia es un manto de diamantes que cubre al mundo..
.Eliana Navarro, nos muestra la lluvia de creciente algarabía, de fresco roce, con olor de alga joven, risueñas voces que cantan con la lluvia.
.Ximena Adriasola saluda a los cielos que la bañan
.Marion Roth: para ella, la lluvia es la esperanza del labrador, el hada madrina de los árboles. Nos dice al final de su poema: la lluvia también es bondad..Ingrid Huet: nos habla de la lluvia que acaricia y adormece las heridas
.A Raquel Parada, le entrega paz en la noche.
.Gladys Bravo; la lluvia es lluvia-canción.
.Para Clara Claudia Michel, la lluvia es sensualidad.
.Para Cristina Larco es lluvia que fecunda la tierra para que nazca la flor del desierto.
.Petricia Pinchón se une al rito poético de clamar a Dios que caiga el agua

3. REPRESENTACIÓN DE LUGARES
Para algunas poetas, en su fantástica diversidad, la lluvia es el pretexto para evocar pueblos y lugares, sucesos significativos, plasmándolos en estampas poéticas de singular fuerza.
.Yolanda Lagos, nos dice: Quemchi bajo la lluvia respiraba…
.María León nos transporta a El Ingenio con su lluvia matapajaritos
.Melania Tello nos lleva a Londres en un estremecedor poema
.Elsie Wood evoca los cielos de Ancud
.Con María Inés Fernández nos trasladamos a una calle de París bajo un paraguas rojo.
.Mery Coloane: viajamos a su pueblo natal
.Nelly Cid nos muestra sus tierras del sur
.Teresa Calderón canta a la lluvia y a los muertos en Pisagua.
.Original me pareció el poema de Rosa Cruchaga “Lluvias”. Hay tantas lluvias como objetos sobre los que cae. Así, la poeta nos dice: llueve rojo en los tejados o sobre una infancia de prados, la lluvia cayó de ovejas.

Imposible sería mencionarlas a todas. Es necesario hacer notar que, tanto las diferencias estilísticas de las autoras, como las distintas aproximaciones al tema de la lluvia, dan a esta antología un carácter variado e interesante. Descontando a las grandes poetas consagradas, como Gabriela Mistral, Winet de Rokha, Teresa Wilms Montt, María Monvel, Ema Jaus, Eliana Navarro, Francisca Ossandón, podemos también hablar de excelencia poética en la mayoria de las escritoras incluídas: hay mucho más que simples tejedoras de versos armónicos o cultivadoras de un lenguaje grato. Hay oficio.
Para finalizar, quiero agradecer a Carlos Ordenes Pincheira por haber incluido un fragmento de un poema escrito por mi abuela materna María Antonieta Lamperein, de su libro Fogatas de Otoño. El poema se llama Recordando, fue escrito en 1921 y en el evoca, en un tono muy dramático, a su esposo muerto. Mi abuela quedó viuda a los 28 años con 8 hijos, uno de ellos fue mi madre, Lina Vera Lamperein. En homenaje a ella y a todas las mujeres poetas de ayer y hoy me tomaré la licencia de compartir con ustedes el poema “Recordando”.

RCORDANDO
María Antonieta Lamperein
1921


Cuando el viento huracanado
sopla en las noches de invierno
y la lluvia que golpea
más y más siento arreciar,
acurrucada en mi cama
recordando yo no duermo
con el alma destrozada
de sufrir y de llorar.

Mientras yo estoy abrigada
en mi lecho tibio y blando
mi amado duerme su sueño
en un estrecho cajón
y acaso sobre su rostro
estará el agua goteando
tendrá la ropa empapada
sobre el quiero corazón.
Y esta idea me trastorna
me hace daño y enloquece
y voy corriendo allá lejos
la sepultura a cavar
y al fin, rendida, lo encuentro
y estrecharlo me parece
y con mis besos ardientes
su helada boca entibiar.

La ilusión se desvanece:
hundo en la almohada la frente
y en el alma y en el cuerpo
siento un terrible dolor
un dolor punzante, loco,
ante el sueño de la muerte
que hace vana mi ternuro
y hace impotente mi amor!

¿Por qué vamos por el mundo
sin dejar huella mas leve
que el rastro sobre la arena
que la ola sobre el mar?
¿Por qué somos cual la sombra
de una rápida centella?
¿Por qué venimos al mundo
para sufrir y llorar?

Riqueza, amor y fortuna
todo acaba, todo muere
pero el alma, el alma vuela
en pos de la eternidad.
El alma es hija de Dios
en el cuerpo aprisionada,
la muerte rompe los lazos
y ella vuela al más allá!

En una noche de invierno
vendrá la muerte a mi lecho.
Mi cuerpo quedará quieto
mi alma libre quedará.
Y allá nos encontraremos
y en abrazo mudo, estrecho,
mi alma a su alma confundida
para siempre quedará.

Y sigue el agua cayendo
y sigue el viento silbando,
mi cerebro desvariando,
sangrando mi corazón.
¡Ay, quién pudiera dormir
entre sus brazos soñando
mi negra pena mentira
y mentira mi dolor!

jueves, abril 26, 2007

UN POEMA


VERDADERAMENTE YO



1


Me soy de luna
y agua
Estrella ardiendo
al fondo de un espejo
Amasijo que sueña
el viento
y lo lleva
y lo trae
en remolinos

Me soy de interrogantes
incompletudes
plenitud del alma
cuando despierto
en el otro
y veo en su rostro
la huella del mundo
el dolor del mundo
el amor del mundo

Me soy entonces
aroma de pinares
cerca del mar:
un poco más humana
tal vez un poco niña
o un poco más perdida
como el pozo sin muros de Pessoa

Pero siempre
siempre

de luna
y agua

viernes, abril 06, 2007

RECITAL DE ESCRITORAS CHILENAS


"Tras la Senda de Gabriela"
Publicado en General el 5 de Abril, 2007, 16:35 por Jackielagos
"Tras la Senda de Gabriela", trece voces de la poesía chilena se tomarán la XXXIII Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.
Una delegación de trece poetas chilenas se presentará en la 33. Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, el día 1° de Mayo, a las 20:00 hrs., en la sala Javier Villafañe del recinto La Rural, bajo el lema "Tras la Senda de Gabriela".
Las embajadoras de la poesía; Astrid Fugellie, Paz Molina, Ana María Vieira, Cristina Larco, Maria León Bascur, Ingrid Huet, Blanca del Río, Ximena Troncoso, Tatiana Olavaria, Jacqueline Lagos, María de la Luz Ortega, Albertina Mansilla y Patricia Pinchón, realizarán un recital bajo el lema “Tras la Senda de Gabriela”, en homenaje a la laureada poetisa , quien , libre de fronteras, llevó la voz de la poesía por el mundo.

El objetivo principal de este recital es la difusión de la poesía femenina chilena actual, una muestra diversa en temática y generacionalmente, que se presenta como una interesante visión del mundo, donde el poema y su lenguaje, son fuente importante del desarrollo intelectual.

Las poetas recitarán sus textos en conmemoración al natalicio de Gabriela y, durante este año, cuando se cumplen 50 años de su fallecimiento, tienen proyectadas diversas actividades, a las que se sumarán más integrantes, en reconocimiento a su espíritu americanista y solidario. En esta senda, inician viaje, con los ojos de Gabriela abiertos al universo, con la convicción que la travesía de las letras por el mundo dejará huellas.

Considerada actividad oficial por Fundación El Libro, patrocinada por la Sociedad de Escritores de Chile, a instancias del programa radial “Carretera Cultural”; las poetas partirán rumbo a la capital argentina, el lunes 30 de abril próximo. Se presentarán el 1° de mayo y participarán de las actividades dedicadas a Chile, el día 3 de mayo.

La 33. Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, organizada por la Fundación El Libro, considerada la muestra editorial más importante de Latinoamérica, a desarrollarse entre el 16 de abril al 7 de mayo, será inaugurada oficialmente el día jueves 19 de abril, a las 18:30 hrs.

martes, abril 03, 2007

LA VOZ DE GABRIELA EN ABRIL


Cada mes compartiremos un poema de Gabriela Mistral, que es decir una mirada de mujer poeta sobre las cosas del mundo. Hoy este hermoso poema, La Casa , simple y complejo a la vez, escrito con el aliento de un himno y que se proyecta desde un espacio hogareño y maternal de enseñanza al hijo, hasta un universo de dimensiones humanas y sociales de gran hondura. He aquí a la Madre, todas las madres,invitando al hijo a ver el Hambre y a ejercer la solidaridad.

LA CASA

La mesa, hijo, está tendida,
en blancura quieta de nata,
y en cuatro muros azulea,
dando relumbres, la cerámica.
Esta es la sal, éste el aceite
y al centro el Pan que casi habla.
Oro más lindo que oro del Pan
no está ni en fruta ni en retama,
y da su olor de espiga y horno
una dicha que nunca sacia.
Lo partimos, hijito, juntos,
con dedos duros y palma blanda,
y tu lo miras asombrado
de tierra negra que da flor blanca.

Baja la mano de comer,
que tu madre también la baja.
Los trigos, hijo, son del aire,
y son del sol y de la azada;
pero este pan "cara de Dios"
no llega a mesas de las casas;
y si otros niños no lo tienen,
mejor, mi hijo, no lo tocaras,
y no tomarlo mejor sería
con mano y mano avergonzadas.

Hijo, el Hambre, cara de mueca,
en remolino gira las parvas,
y se buscan y no se encuentran
el Pan y el Hambre corcovada.
Para que lo halle, si ahora entra,
el Pan dejemos hasta mañana;
el fuego ardiendo marque la puerta
que el indio quechua nunca cerraba,
¡y miremos comer al Hambre,
para dormir con cuerpo y alma!

jueves, marzo 29, 2007

Sobre mi libro "Por tan Profundo"


El año pasado publiqué mi libro de poemas "Por tan Profundo", el que tuvo su primera presentación en el marco del VII Encuentro Internacional de Escritoras "Rosalía de Castro", en Galicia, España. Posteriormente fue presentado en la Sociedad de Escritores de Chile, El grupo Fuego de la Poesía, El P.E.N Club Internacional y en el XI Encuentro Internacional de escritores de Chañaral.
Ahora quiero compartir con ustedes la información que apareció en septiembre del 2006 en la Revista Alerce. Para ello, pueden acceder copiando la siguiente dirección (ponga copiar y pegar): http://www.sech.cl/web/index.php?option=com_content&task=view&id=161&Itemid=56
Estas son las reseñas:

“Por tan Profundo” de Ana María Vieira, Editorial Semejanza. Santiago, Chile, 2002,


1. Comentario publicado en la revista Correo de la Poesía Nº 96, invierno 2006, por el poeta y Director de dicha revista, Alfonso Larrahona Kästen

Tercer poemario de la poeta y narradora, en él da muestras de su dedicación por las formas poéticas incluyendo: sonetos, haikus y poesía versolibrista. Con prólogo de Paz Molina aparece este nuevo poemario que es una obra de madurez poética; su lectura nos proporciona con largueza la calidad de su poesía ubicada desde ya entre la mejor poesía femenina del país.


2. Comentario del poeta Carlos Ordenes Pincheira (fragmentos)
Ana María Vieira tiene un bien ganado prestigio como poeta a través de sus libros anteriores. En esta obra se advierte la misma destreza, la palabra justa, nunca desacertada. Ya desde “Peligros Posibles” comenzamos a notar claramente un avance en su tonalidad lírica. Hay una tristeza suave y dulce que se va transformando a poco andar en hermosa ofrenda en nombre del amor, ese amor que nunca decrece y que en cada poema surge con mayor vigor y entrega.

…En esta obra nos complace leer algunos sonetos de calidad impecable. Tiene oficio. Es poeta, sin lugar a dudas. En “El sueño de la doncella” vemos con qué soltura, con qué maestría, va cincelando cada verso:


Por la ventana ha entrado un hombre muerto,
blanca la sien y en sombra desvelado,
mientras, la luna –ciega- se ha ocultado
bajo las luces, más allá del huerto.

A la doncella toma en cuerpo abierto
y la corteja con su brazo helado.
Sueño del agua, sueño del amado
en este engaño del que todo es cierto.

El cielo entero goza y se estremece
cuando en amor disfruta que la bese.
Como una brisa queda deshojada.

Despunta el día. Ella se ha dormido.
Todo en su alcoba se ha desvanecido
menos la huella roja de una espada.

3. Comentario de la poeta Cristina Larco Briceño leído durante la presentación del libro en la Sociedad de Escritores de Chile, Santiago, Chile, el 17 de agosto de 2006



POR TAN PROFUNDO.
AMOR Y AGUA EN LA POESÍA DE ANA MARIA VIEIRA
Por Cristina Larco Briceño
... esta es agua sonámbula
que baila y que camina
por el filo de un sueño...
Dulce María Loynaz


Llevados por invisibles hilos nos descalzamos frente al umbral de este nuevo poemario de Ana María Vieira, son siete afluentes de espacios húmedos que recorreremos, siete los giros del caleidoscopio acuático, siete transparentes veladuras que la autora va despojándose como el agua de siete velos de Dulce María Loynaz, desnudándose y nunca desnuda, son galerías verdiazules distintas entre sí en la forma, con una conexión central: el amor, el amor, motor y torrente de la vida será la brújula que guiará nuestras pasos, entonces abiertos todos los sentidos, les invito a adentrarnos en el primer recinto, agudizar los oídos y soñar......
“escucho el sonido/ reptante del amor/ a pleno pecho/ a toda fuerza/
nos dice Ana María y se proclama terrestre para asistir a este ceremonial: círculos que suceden al son de violines, cantos de grillos, péndulos que retumban, relámpagos, ecos, truenos, rumorosas vertientes, cascadas , goterones, gemidos, de este amor que sólo amando se prodiga., agua que cae y se eleva hasta ser niebla del silencio.


Silencio y niebla, preludios tranquilos para pasar a hierro forzado en el segundo paraje.
“Por tan profundo”, título del poema que da nombre al libro revela un entorno más hermético, en conjugaciones que evocan los antiguos juglares, el poema fluye en la corriente del extenuado cuerpo y se abre al mar, con ecos lejanos: llántica, cálida, álgida , prístina, caminamos en gerundios en acciones constantes, es el amor hecho verbo, sabiduría y fuerza que nos traslada y ubica “donde todo tiene sentido”, nos da un mandato para vivirlo en profundidad.


La tercera habitación es la que llamaremos “clásica”: poemas escritos con impecable métrica, “Amor en sonetos” trae reminiscencias de románticas y apasionadas doncellas, pero también manifiestos de lo que debe ser un poeta :

...y ser desde un comienzo agua con brío
sumergido en la copa de algún verso:
multiplicar volcanes sobre el frío
permanecer por fin en luz inmerso
y dando con amor todo lo mío
volver a imaginar el universo

Poemas de fina artesanía, versos acanalados desembocan en otros de entrega pronta, breves, brevísimos y que componen el cuarto espacio del Breve amor en donde la autora , sueña, demanda, advierte, ama, pequeñas voces de este paraje que habla del otoño “temblor de hojas/ rumor de grillos extenuados/ la tarde pone oro en mis pezones.


Con la sensualidad de la naturaleza seguimos deslizándonos hacia el corazón del bosque , impregnados de humedad, de ríos, por doquier, enfatizando la alianza de la autora con el agua. Brota la atmósfera emocional en donde se busca al amado.....

¿Dónde te encuentro
Tal vez en un tiempo demasiado ciego
un tiempo que no calma
mi sed de tu palabra.

En este espacio tropezamos con infinidad de cuerpos incorpóreos que levitan el “bosque de la noche pequeña”, territorio verde que se extiende hacia atrás y sugiere un interno memorial donde yace todo aquello que se ha perdido pero cuyos murmullos resuenan por siglos.


En el sexto recinto se han encendido las flamas para homenajear los lazos de sangre de la autora, es un altar familiar en donde ancestros y descendientes cohabitan, surge la figura paterna, casta de antiguos navegantes y poetas portugueses....

donde estás padre/ tanto dolor tu ausencia/ y tanto amarte.

La luz de la madre emerge en la simbólica madreluna regidora de las mareas y los ciclos femeninos, se escucha el arrullo para los pequeños nietos, o la tierna convocatoria .a los hermanos para volver a aquella casa antigua, barcaza de piedra......hermano/ volvamos a la isla/ oiremos el mar/ como susurra/ infancias.... También el orgullo y la continuidad de la estirpe representada en sus cuatro hijas que desde el dolor de las aguas, poblarán el universo con sus genes. Y finalmente, el recuerdo de la abuela Antonieta, encargada de encender el fuego poético y primigenio en este lar.


Y el agua, siempre el agua, el agua, elemento femenino de transición, profundidad y fuente donde nace nuestra sustancia, atrae los recuerdos. También seminal y mediador)...El agua está latente en la obra literaria de la mayoría de las autoras, como Julia de Burgos, Alfonsina Storni, Virginia Wolf, por citar algunos ejemplos. En el caso de Ana María Vieira es un componente esencial y vasocomunicante del amor, omnipresente en sus versos.
No vislumbramos aridez en los poemas de este libro, ni siquiera para mencionar la muerte. La muerte, según el poema viaje dedicado a Alejandra Pizarnik, está simbolizada por un pozo azul que nos espera. No obstante, para indicar angustia, ausencia o soledad, la palabra utilizada es sed.


Imploración al agua

El séptimo y último espacio de este poemario es una fantástica plegaria a este vital elemento, son catorce desgarradores cantos a la madre moribunda que nos revelan la agonía, antesala de la muerte: la madre se diluye en medio de la sequedad, implorando el agua que le es negada.
Innovadores versos, empañados de dolor, que de pronto son súplicas, mantras o estertores.
La autora incursiona en una poesía de vanguardia en donde la importancia está dada por las sensaciones que la fonética del verso emplaza. Instalación poética hacia lo más oculto, para vibrar en la sensibilidad de nuestras fibras. Estos catorce cantos logran con creces su cometido.


Por tan profundo, es una obra que demuestra el talento de esta multifacética escritora.




Extracto de laPresentación del libro “Por tan profundo” de Ana María Vieira, en la Casa del Escritor.
Jueves 17 de agosto 2006.

domingo, marzo 18, 2007


Quiero invitarte a visitar mi sitio en www.metroflog.com/equipoesia donde voy reuniendo mis fotografías más entrañables, principalmente de viajes, con breves comentarios o postales poéticas. Es una forma de reconstruir la travesía y compartir mis imágenes y experiencias.